sábado, 16 de octubre de 2010

reptiles en peligro de extincion

México es una de las dos naciones del mundo, junto con Australia, más ricas en especies de anfibios y reptiles, sin embargo, en nuestro país estos animales son los menos protegidos en las reservas ecológicas, revela un estudio de Georgina Santos Barrera, investigadora de la Facultad de Ciencias, y Jesús Pacheco Rodríguez y Gerardo Ceballos, especialistas del Instituto de Ecología de la UNAM.
“En las áreas protegidas del país están representadas 98 por ciento de las especies de aves y alrededor de 75 por ciento de los mamíferos, mientras los reptiles tiene sólo 61 por ciento y la situación de los anfibios es crítica con 38 por ciento”, señala Pacheco Rodríguez.

Para el investigador la principal desventaja de estos animales es “que no son carismáticos como el jaguar, un oso o una águila real. La gente no se asocia a ellos”, indica.
La investigación señala que las especies más necesitadas de protección, como las endémicas y las que se encuentran en peligro de extinción, están sus representadas en las áreas protegidas, es decir, se encuentran representadas en menores proporciones que las especies no endémicas y consideradas fuera de riesgo.
“Por ejemplo, sólo 29 por ciento de los anfibios y 46 por ciento de los reptiles endémicos de México presentan poblaciones en estas reservas, lo que significa una debilidad del sistema de áreas protegidas. Además, es interesante indicar que la mayoría de estas especies se encuentran representada en una solo reserva, los Tuxtla en Veracruz”, menciona el especialista.
En México se conocen 360 especies de anfibios y 804 de reptiles, de los cuales el 60 por ciento es endémico del país y se ubican principalmente en las islas del Golfo de California, la Sierra Madre del Sur de Guerrero y Oaxaca, y el eje Volcánico Transversal.
De estos estudios se desprende también que las áreas protegidas seguirán siendo insuficientes para proteger la diversidad biológica de México, sobre todo si se considera la enorme riqueza de especies de plantas e invertebrados.
“Una tarea fundamental en la conservación de especies es determinar cuáles son prioritarias debido a que se encuentran en un mayor riesgo de extinción. El número de este grupo es alarmante pues se estima que alrededor de 613 especies de reptiles y anfibios presentan algún grado de amenaza y existen otras 100 que ya empiezan a tener distribuciones restringidas”, explica.
El estudio señala que aunque en México existen más de 150 reservas federales que protegen la mayoría de los ecosistemas del país, no existe información efectiva sobre la efectividad de esa reservas para mantener la diversidad biológica.
Y advierte que para consolidar la estrategia de conservación del país es fundamental priorizar la conservación de las áreas protegidas con base en su diversidad biológica y determinar áreas adicionales que requieren ser convertidas en reservas para tener representadas al mayor número de especies,
Para el investigador otro de los problemas que enfrentan tales especies es su distribución natural “tiene una reparto muy pequeño, es decir, son microendémicas como sucede en varias partes de Oaxaca, donde sólo encontramos cierta variedad en la punta de un cerro o en una barranca, lo que hace que su protección sea complicada”.
Pero más allá de esa desventaja agrega que las principales causas para hablar de una posible extinción fueron hechas por el hombre “ desconocemos que es un reptil o un anfibio. Hablamos de que las serpientes son bastantes menos venosas, pero desconocemos que la mayoría de ellas no son venenosas y eso es falta de una educación ambiental”.
“Lo demás se asocian a esto y son los problemas de siempre: cortamos un bosque y ellas desaparecen, provocamos un cambio de suelo y les causamos condiciones adversas. Con ellos estamos extinguiendo poblaciones regionales, un ejemplo lo es un sapo endémico de Sonora -bufo retifornios— el cual hace 8 años se encontraba en Hermosillo y hoy ya no existe por el crecimiento de esa ciudad”.